En mi casa hasta cualquier nivel de dependencia

Etxean Ondo es un Proyecto Piloto promovido por Gobierno Vasco que pretende aplicar el Modelo de Atención Centrado en la Persona, orientado a “conseguir mejoras en todos los ámbitos de la calidad de vida y el bienestar de la persona, partiendo del respeto pleno a su dignidad y derechos, de sus intereses y preferencias, y contando con su participación”. En el vídeo que presentamos, “Estar como en casa“, de la Fundación Matía, podemos ver cómo se revoluciona una residencia de mayores cuando las cuidadoras dejan de usar bata blanca y se dirigen a los mayores para preguntar “¿Y qué os apetece que hagamos?” o “¿Me echas una mano para poner la mesa?”.

Los centros residenciales de mayores que han implantado este sistema en España son aún escasos. Pero los resultados de las unidades de convivencia donde “trabajar lo cotidiano como terapéutico” son espectaculares. Si la persona mayor puede hacer la cama, sigue haciendo la cama. Y la comida en la medida que pueda, la plancha… ¿Por qué no elegir el menú, con el consejo (no la imposición) de las cuidadoras… Y es que sabemos que una excesiva asistencia crea más dependencia.

Las dificultades que proyectos como Etxean Ondo han de salvar son enormes. Porque las normas que regulan las residencias de mayores imposibilitan la adaptación a las preferencias del mayor hasta el punto en que lo hace esta experiencia. Porque la resistencia inicial de los propios profesionales es alta… De los resultados que se obtengan en proyectos como este habrán de venir inevitables cambios normativos en la regulación de las residencias de personas mayores.

Para un jubilar, o senior cohusing, donde a diferencia de las residencias, la persona mayor sí vive en su propia casa sin la obligatoria tutela de un director de residencia o comisión gestora, el modelo de atención integral y centrado en la persona es el único válido, porque implanta solo los servicios de atención que se necesitan (no los ratios que marca una ley), porque la responsabilidad y la toma de decisiones sigue siendo de la persona, porque valora las capacidades sobre las discapacidades, porque garantiza la máxima autonomía de la persona, porque si en la residencia de mayores este sistema sirve para “estar como en mi casa”, en el jubilar sirve para estar en casa hasta cualquier nivel de dependencia.