El 1 de octubre, coincidiendo con el Día Internacional de las Personas Mayores, se presentó oficialmente en el Ayuntamiento de Madrid el Plan de Acción Madrid Ciudad Amigable con las Personas Mayores 2021-23, cuya elaboración ha sido coordinada por la Asociación Jubilares. El plan, que consta de 109 acciones y 239 actuaciones, supone un coste total por encima de los 900 millones de euros.
La elaboración de este documento ha implicado una estrecha colaboración con decenas de profesionales del Ayuntamiento de prácticamente todas las áreas de gobierno. La Dirección General de Mayores del Área de Familias Igualdad y Bienestar Social del Ayuntamiento confió a finales de 2020 a la Asociación la gestión de un plan cuya elaboración se ha visto especialmente dificultada por las restricciones derivadas de la pandemia.
En la presentación del pasado día 1, el delegado de Familias, Igualdad y Bienestar Social, Pepe Aniorte, destacó la transversalidad del plan y la amplia participación. Aniorte subrayó que las dos grades líneas de acción del plan son intervención sobre la soledad no deseada y la atención a las familias cuidadoras. También apuntó como principales retos de la política municipal reorientarse para llegar a unas personas mayores cada vez más diversas y heterogéneas y estar más cerca para detectar y atender con rapidez las necesidades con los servicios domiciliarios.
Por su parte, el Director General de Mayores, Juan Carlos Pérez Aguilar, agradeció el trabajo de las áreas municipales y resaltó cono enfoques transversales del plan la heterogeneidad de las personas mayores, la igualdad de género y la equidad para evitar desigualdades entre los distritos de la ciudad.
En el acto también participaron la vicealcaldesa Begoña Villacís y varios miembros del Consejo Sectorial de Personas Mayores de Madrid.
Este plan supone dar continuidad al compromiso de Madrid con la Red de Ciudades y Comunidades Amigables de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Se trata del segundo plan de acción (el primero estuvo vigente entre 2017 y 2019) y supone entrar en la fase de mejora continua prevista por la metodología de la OMS, es decir, la renovación del compromiso de la ciudad con los principios y valores que inspiran esta red:
- Respeto a la diversidad de capacidades, recursos, estilos de vida y preferencias de las personas mayores, que constituyen un colectivo heterogéneo.
- Identificación y abordaje de las desigualdades de género, discapacidad, orientación sexual, estatus socioeconómico, origen étnico, religión/creencias, urbano/rural, etc.
- Participación de las personas mayores en todos los ámbitos de la vida.
- Valoración y promoción de su contribución a la sociedad.
- Respeto a los derechos de las personas mayores
para que envejezcan y mueran con dignidad. - Participación significativa de las personas mayores en el diseño y creación de las actuaciones para mejorar la amigabilidad en todas las etapas (establecimiento de la agenda, aplicación y evaluación). La creación de una ciudad o comunidad amigable con las personas mayores requiere colaboración y coordinación entre sectores y con diversas partes implicadas.
- Enfoque participativo de abajo-arriba combinado con un compromiso político de arriba-abajo y dotación de recursos.
- Enfoque de ciclo vital que apoye las relaciones intergeneracionales, la solidaridad y el apoyo mutuo.
Cabe recordar que la Asociación Jubilares es miembro del Grupo de Trabajo de la Red de Ciudades Amigables y lleva años coordinando la elaboración de diagnósticos y planes de acción relacionados con la amigabilidad proyectos para diversas ciudades (Guadalajara, Coslada, Fuenlabrada, Murcia, etc.).